Los británicos sorprenden al mundo entero
Se abre un nuevo capítulo en la historia, cuya evolución e impacto es difícilmente predecible en el corto plazo. El inversor debería tener diversificado su patrimonio, ajustar su cartera a su perfil y no dejarse llevar por el pánico colectivo.
Las últimos días han sido un duro golpe, no por las caídas de los mercados que a veces ocurren (por las incertidumbres de la economía) sino por el terrible error que, a nuestro juicio, han cometido los británicos tanto desde el punto de vista político (convocar el referéndum) como el voto final de sus ciudadanos movidos por unas promesas difícilmente aplicables y que no contaban con un plan para ser llevadas acabo.
El resultado del referéndum ha motivado un «shock» en los mercados, las empresas y las clases políticas. Todos tenemos que digerir este nuevo contexto, valorar sus consecuencias y acostumbrarnos a un período de incertidumbre política que lamentablemente perdurará en el tiempo.